miércoles, 11 de agosto de 2010

Un Verano Indiferente

Ya no te traigo conmigo
Te abandono sin prisas
En total apatía.

Ya no viajas conmigo
te hemos amado entre risas
y tu inmortalidad me asfixia.

Acá te dejo, mar ingrato
No puedo llevarte sin su presencia
No quiero amarte en su ausencia.

Te veo desde mi tristeza
No escucho tu sinfonía
Tu perpetuidad hoy es mi agonía.

Fuimos dos amantes fieles a tus mareas
Yo sin él no puedo navegarte
Su mortalidad le hizo naufragar.

Ya no me acompañas
Me marcho, te doy la espalda, te abandono
Acá te dejo, sin titubeos.

Con rencor, rabia, con desamor
Mi corazón solo tiene cupo
Para el dolor.

Mar amado, mal de mar
Nos vamos él y yo
A ti te puedo abandonar
A él lo tengo que amar.

A la memoria de mi esposo